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Licenciatura Preescolar: Licenciatura Preescolar: AUTORES DE LA PEDAGOGIA

Juan Amos Comenius

(1592-1670) Jan Amos Comenius (en checo, Komenský) nació el 28 de marzo de 1592 en Moravia, región de la actual República Checa. Considerado el fundador de la pedagogía moderna. El sistema escolar de la época se encontraba en un estado deplorable. Por ejemplo, solo a los varones se les consideraba dignos de recibir educación, aunque se excluía a los que nacían en la pobreza. La instrucción en las aulas consistía principalmente en llenar la cabeza de los estudiantes con sintaxis, palabras y frases del latín. ¿Por qué razón? Porque la Iglesia Católica controlaba la mayoría de las escuelas del medievo, y dado que la liturgia se celebraba en latín, era fundamental la enseñanza de esta lengua para asegurar una provisión constante de futuros sacerdotes. Además, no se daba atención alguna a fijar objetivos concretos en el aprendizaje, ni tampoco la educación que recibían los alumnos les ayudaba a pasar progresivamente de lo sencillo a lo complicado. La disciplina era severa, en ocasiones incluso cruel, y el ambiente moral, degradado.
Comenius escribió que el estudio tenía que ser “completamente práctico, completamente grato, de tal manera que hiciera de la escuela una auténtica diversión, es decir, un agradable preludio de nuestra vida”. También opinaba que la escuela debía centrarse no solo en la formación de la mente, sino de la persona como un todo, lo que incluiría la instrucción moral y espiritual.
Jean-Jacques Rousseau
(1712-1778)

Filósofo y escritor suizo (Ginebra 1712-Ermenonville 1778) cuya obra ejerció una influencia decisiva sobre la historia política e intelectual de su tiempo.
Rousseau es autor de una doctrina por la cual piensa que el hombre es naturalmente bueno, que la sociedad corrompe esta bondad y que, por lo tanto, es necesario volver a la  virtud primitiva. De aquí un vivo sentimiento de la naturaleza y un gusto por la soledad que acompañaron  a Rousseau hasta su muerte.

Johann Heinrich Pestalozzi

(1746-1827) Nacido el 12 de enero de 1746  en Suiza. Se instala en Neuhof el año 1771. Muere el 17 de febrero de 1827. Fundo diversos centros educativos que inspiraron a otras escuelas a seguir sus métodos pedagógicos. Influido por las teorías de Rousseau, interpreto la educación como libre y espontánea formación de la personalidad del niño, que el educador debe guiar a la luz de una elevada conciencia moral y religiosa.
Reformador de la pedagogía tradicional, dirigió su labor hacia la educación popular. En 1775 abrió en Neuhof una escuela para niños pobres inspirada en el modelo del Emilio de Rousseau. El proyecto fracasó, como también otro similar que llevó a cabo en Stans. En 1797 publicó Mi investigación sobre el curso de la naturaleza en el desarrollo del género humano, su obra de mayor repercusión. Reemprendió sus prácticas pedagógicas en un castillo cedido por el gobierno, en Berna, experiencia que reflejó en su obra Cómo Gertrud enseña a sus hijos (1801). Pestalozzi aspiraba a propiciar la reforma de la sociedad desde una educación que procurase una formación integral del individuo, más que la mera imposición de determinados contenidos, y que concediera un amplio margen a la iniciativa y capacidad de observación del propio niño. Su doctrina no tardó en propagarse, y llegó a ser muy admirada por personajes como Fichte o Herbart, así como por la mayoría de los jóvenes pedagogos de la época.

Célestin Freinet

(1896-1966) Nació el l5 de octubre de l896, en Gars, pequeña población montañosa de los Alpes Marítimos franceses. Su pedagogía fue una actividad concreta, vivida como “técnicas de vida”, según su propia expresión, al servicio de la liberación de los hombres.  Creador de la cooperativa de la enseñanza laica y de la escuela moderna francesa, desarrollo una pedagogía popular, basada en la espontaneidad, el trabajo colectivo y el método activo.
Así nació la idea de una escuela libre experimental. En l934 y l935 Freinet, con el apoyo del movimiento, amigos políticos y la prensa izquierdista, consigue construir una escuela en Vence. Los alumnos son en su mayoría internos pertenecientes a las capas sociales desfavorecidas o a familias en apuros. “La mayoría son hijos de obreros parisienses, casos sociales procedentes de la Asistencia Social, hijos de maestros en su mayor parte inscritos por motivos de salud y, aisladamente, cuatro o cinco alumnos de familias acomodadas que confían en nosotros” (Elise Freinet, l968).

María Montessori

(1870-1952) Nacida en Chiaravalle (Provincia de las Marcas) el 31 de agosto de 1870, doctora en medicina, encargad de un curso sobre la educación de los niños frenástenicos para los maestros de Roma y directora durante dos años de una Escuela normal ortofrénica en la miosma ciudad, continúo sus estudios en Londres y París, frecuentó después de 1902 los cursos de filosofía en la Universidad romana, los de psicología experimental en las de Turín y Nápoles, y dio cursos libres de antropología pedagógica  en la Universidad de Roma en 1907 y la publicación de su primera obra El método de la pedagogía  que, como las que siguieron, fue traducida a muchas lenguas, y el primer curso para maestros sobre su método dado en Città di Castello, protegida por dos bienhechores y amigos de la educación del pueblo, el barón Leopoldo Franchetti y su esposa Alicia. Su actividad docente, de propaganda, de organización de las Case, se desplegó en el mundo entero durante 40 años; finalemente creó el Centro de Estudios Pedagógicos en la Universidad para extranjeros de Perugia, donde dio cursos y participó mucho en la actividad de la UNESCO. Murió el 6 de mayo  de 1952 en Nordwijck en los Países Bajos.
Entre sus iniciativas particulares dignas de mención, debe citarse la Iglesia de los Pequeños fundada en Barcelona después de 1916, con las mismas normas que la Casa dei Bambini, o sea con muebles, decorado, objetos de liturgia católica, etc., apropiados al niño: ensayo que estaba destinado a ser único en su clase y al que no correspondió nunca un estudio sobre el sentimiento religioso del niño y su génesis; aunque haya dado algunas aportaciones y orientaciones a la educación religiosa infantil como I bambini viventi nella Chiesa (1924), La santa messa spiegata ai bambini (1949), La vita in Cristo (1949), etcétera.
Desde 1913-14 sus estancia en Norteamérica, en muchos países europeos (Alemania, Gran Bretaña, España, Países Bajos, Suecia)  y asiáticos (China, India, donde vivió bastante tiempo), las múltiples traducciones  de sus escritos en casi todas las lenguas, los cursos y círculos de estudios montessorianos, difundieron en todas partes la doctrina y la institución de la educación italiana, esparciendo su propia influencia en los países que, como Francia, Austria o Suiza, no llegaron a conocer una verdadera floración de instituciones específicamente suyas.
John Dewey
(1859- 1952) Filósofo nacido en Burlington, Vermont, Estados Unidos el 20 de octubre de 1859.  Es llamado por muchos el “padre de la educación renovada”. Contrastó sus principios educativos en la famosa escuela laboratorio de carácter experimental, denominada Escuela Dewey, instituida en la Universidad de Chicago en 1896. Concibió la escuela como un espacio de producción y reflexión de experiencias relevantes de vida social que permite el desarrollo de una ciudadanía plena. Sostenía que lo ofrecido por el sistema educativo de su época no proporcionaba a los ciudadanos una preparación adecuada para la vida en una sociedad democrática. El «método experimental» de su pedagogía se basa en la educación de la destreza individual, de la iniciativa y del espíritu de empresa en detrimento de la adquisición de conocimientos científicos.
Para Dewey la educación es una constante reorganización o reconstrucción de la experiencia a partir de esto su principal preocupación fue poder desarrollar una educación que pudiera unir la tradicional separación entre la mente y el cuerpo, entre la teoría y la practica o entre el pensamiento y la acción, ya que el pensaba que al hacer esta separación, llamada “natural” la educación, para él tendía a ser académica y aburrida, alejada de los intereses reales de la vida: “Cada vez tengo más presente en mi mente la imagen de una escuela; una escuela cuyo centro y origen sea algún tipo de actividad verdaderamente constructiva, en la que la labor se desarrolle siempre en dos direcciones: por una parte, la dimensión social de esta actividad constructiva, y por otra, el contacto con la naturaleza que le proporciona su materia prima”.
Para este mejoramiento de la educación pensaba el autor que esta no se podía lograr con una mejor educación de los maestros, sino con una mejor educación de los padres y los funcionarios escolares ya que para él, ellos son la última palabra y el carácter de esa palabra dependía solamente de la educación que ellos hubieran recibido: “Una persona que recibiera educación será una que la entregue”.
Afirmaba también que los niños no llegaban a la escuela como limpias pizarras pasivas en las que los maestros pudieran escribir las lecciones. “Cuando el niño llega al aula ya es intensamente activo y el cometido de la educación consiste en tomar a su cargo esta actividad y orientarla”
A partir de esto, el autor pensaba que la labor de la escuela era establecer reglas, por medio de las cuales, los alumnos obraran de tal modo que, aun después de haber obrado, a esos alumnos no se les lleve a ver la relación entre el resultado y el método seguido, ya que solo por medio de sus propias observaciones, reflexiones, formación y comprobación de sugestiones puede un alumno ampliar y rectificar lo que sabe. Creía firmemente que se podía aprender haciendo algo que no se comprendiera. Como consecuencia de esto la tarea del maestro es realmente esto ser un maestro, no un amo o “autoridad”, este debe tener suficientes conocimientos de sus alumnos, de las necesidades, experiencias, grados de habilidad y conocimientos de estos etc. para poder, no dictar fines y planes, sino participar en una discusión referente a lo que ha de hacerse en conjunto con sus alumnos. En este ámbito de conocer profundamente a los alumnos era fundamental para Dewey el respeto de la individualidad y libertad de los alumnos y a partir de estas habilitar a los alumnos que prestaran cooperación especial en grupos de sus interés y a participar de sus actividades de tal forma que la conducta social sea cuestión de su propia actitud mental, y no puro dictado autoritario de sus actos ya que creía que repetir materia en forma exacta a como la concibe la persona mayor queda sin dirigir la originalidad de la individualidad.
Dewey sostenía que la escuela era una “comunidad embrionaria” que haría mejorar toda la sociedad haciéndola democrática y armoniosa, “la escuela es el factor democrático por excelencia”.
La propuesta metodológica de Dewey consta de 5 fases:
1.     Consideración de alguna experiencia actual y real del niño.
2.     Identificación de algún problema o dificultad suscitados a partir de esa experiencia.
3.     Inspección de datos disponibles, así como búsqueda de soluciones viables.
4.     Formulación de la hipótesis de solución.
5.     Comprobación de la hipótesis por la acción.
Dewey mostró un sentido práctico para planificar y desarrollar un currículum integrado de las ocupaciones (actividades funciones ligadas al medio del niño), incluyendo previsiones de desarrollo del programa en ciclos temporales cortos.
“Una inspección cuidadosa de los métodos que han sido permanentemente exitosos en la educación formal revelará que su eficiencia depende del hecho que ellos vuelven a la situación que causa la reflexión fuera del colegio en la vida ordinaria. Le dan a los alumnos algo que hacer, no algo que aprender; y si el hacer es de tal naturaleza que demanda el pensar o la toma de conciencia de las conexiones; el aprendizaje es un resultado natural.”
Para llegar a la finalidad formativa del conocimiento, John Dewey enuncia tres etapas fundamentales:
·        Los hechos y los niños son estúpidos y no aprenden acontecimientos científicos.
·        Las ideas y razonamientos.
·        La aplicación de los resultados a nuevos hechos específicos.
Para aplicar estos principios en la escuela, dice Dewey que “las etapas formales indican cuáles son los puntos que deben tener en cuenta los maestros cuando se preparan para dar una lección, no las que deban seguirse para enseñar”. (Dewey, “Comment nous pensons”)
Según el psicopedagogo estadounidense, recién cuando se han recorrido estas tres etapas, se ha completado la enseñanza de una lección.
La nueva intuición de la vida está en la base de la escuela activa.
Sus ideas pedagógicas están íntimamente ligadas a su pragmatismo y su instrumentalismo. Se debe aprender haciendo, resolviendo problemas concretos y personales, y no escuchando.
Dice Dewey: “Toda educación deriva de la participación del individuo en la conciencia social de la especie.”
Estas son las ideas que mejor sintetizan el pensamiento de Dewey una educación libre e individual, la que su tiempo fue llamado “Progresismo Pedagógico” estas ideas la verdad suenan bastante interesantes de aplicarlas en nuestro sistema educacional ya que tiene bastantes cosas positivas y rescatables como respetar la individualidad y libertad de los alumnos para así poder ayudar a cada uno de ellos según sus necesidades y capacidades, pero este mismo punto también tiene una gran desventaja que es, hasta qué punto se puede considerar “libertad” para ejercer esta práctica, en este sentido creemos que sería necesario educar a los niños en la libertad desde pequeños para que así ellos se sientan los protagonistas de su propia educación.


http://pedagogia.mx/historia/

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1 comentarios:

Jesús Ramiro Cáceres Nieto dijo...

Lic.Zuleima: Bien, muy bien.

Cordialmente,

Jesús Ramiro

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